Hoy, la mitad de los universitarios estudia en planteles privados y son éstos los que han hecho posible absorber la explosiva demanda de cupos.
El gobierno debe tener una posición clara y fundada y traducirla en propuestas que no dejen la solución librada a los intereses particulares.
Es positivo que La Moneda utilice sus atribuciones para intentar fijar, a través de proyectos de ley, los términos de la discusión.
El gobierno no debe ceder a presiones surgidas de la contingencia para abordar temas de gran alcance que requieren un debate de fondo.
Como ha sido frecuente durante la crisis generada por el movimiento estudiantil, la Concertación equivoca el foco.
