¿Eres el líder de la manada? ¿Un seguidor? ¿Estás en un punto intermedio?
Estamos aquí para averiguarlo. Responde estas 12 preguntas personales, y analizaremos tu personalidad y te diremos en qué punto te encuentras dentro de la jerarquía masculina y qué significa eso.

Resumen de preguntas
- Es bastante difícil. Las personas suelen intimidarse por mí.
- Es muy fácil. Tiendo a conectar con las personas a un nivel más profundo.
- ¡Es muy fácil! Soy muy extrovertido/a y social. Hablaré con todos.
- Es muy difícil, pero normalmente no me interesa hacer amigos.
- Me aseguro de que sepa qué toleraré y qué no.
- Hago todo lo posible por olvidar y perdonar.
- Lo tomo a broma y hago un chiste sobre eso.
- Me vengo de esa persona trabajando más duro y teniendo más éxito.
- Soy un/a líder y muy respetado/a.
- Soy observador y sensible.
- Tengo buen humor y soy de buen trato.
- Soy independiente y libre.
- Me gusta que las cosas salgan a mi manera y no soy tan flexible.
- En ocasiones, me falta coraje.
- A veces, me cuesta ponerme serio.
- Paso tanto a tiempo a solas que, a veces, descuido a mis seres queridos.
- Me concentro. Sé que me desenvuelvo bien bajo presión.
- Me tomo un tiempo para pensar y relajarme.
- Abordo las cosas con positividad y una sonrisa. ¡Todo sale bien!
- Abandono la situación y busco algo más sencillo.
- Mi ambición y mis objetivos.
- El altruismo.
- La felicidad.
- Mi sentido del deber.
- Soy el/la líder que organiza el grupo y se asegura de que se hagan las cosas.
- Brindo nuevas ideas e indicaciones para el grupo.
- Mantengo la atmósfera animada y la motivación en todos.
- Mantengo la cabeza baja y realizo mi propio trabajo. No me gusta trabajar con los demás.
- Me gustan las reglas, pero solo cuando yo las pongo.
- Me gusta cuando son por el bien mayor.
- Depende. Algunas reglas son buenas, pero otras se pueden romper.
- Detesto las reglas.
- Prefiero recibir, pero aun así doy mucho.
- Prefiero dar y eso me hace feliz.
- Prefiero más dar, pero también tomo mi parte justa.
- Prefiero recibir y no me avergüenza eso.
- Sí. Sé cómo dominar un lugar con facilidad.
- Rara vez. Prefiero más escuchar.
- Normalmente. Tiendo a agradarles a las personas, pero no hablo demasiado.
- No realmente, pero no me importa. Me gusta más actuar que hablar.
- Sí. Nunca dejaré pasar la oportunidad de probarme a mí mismo.
- No realmente. Preferiría colaborar o hacer las cosas juntos.
- Normalmente, pero solo para divertirme.
- No. No le veo sentido a competir.
- A por todo o nada.
- Sé tú mismo.
- La vida es bella.
- Marcha al ritmo de tu propio tambor.
Otros test
Alpha a Omega: Todo sobre las jerarquías masculinas
En 1930, el conductista animal Rudolph Schenkel analizó grupos de lobos con la esperanza de aprender algo sobre su comportamiento y organización social. Lo que descubrió fue que un lobo macho alfa tendía a sobresalir del resto y empleaba conductas tales como la agresión y el dominio para reunir la mayor cantidad de recursos, consolidando así su papel como líder.
A partir de allí, otros científicos tomaron la investigación de Schenkel y la aplicaron en varones humanos, creando así un sistema de orden social que incluye machos alfa, betas, gammas, sigmas y otras clasificaciones. En teoría, cada varón humano encaja dentro de una de estas clasificaciones, lo cual determina su disposición general y sus comportamientos cotidianos.
Existen dos advertencias aquí. En primer lugar, la investigación de Schenkel se enfocó únicamente en los lobos en cautiverio. Investigaciones posteriores en manadas de lobos salvajes en los años 60, principalmente realizadas por David Mech y otros conductistas, descubrieron que los lobos son, por naturaleza, más colaborativos y cooperativos de lo concluido en la investigación de Schenkel, y que cualquier “perro líder” normalmente llegaba a ese punto simplemente apareándose y teniendo cachorros, los cuales a la larga se convertirían en su manada; y los cachorros generalmente respetan a sus mayores, incluso en la naturaleza.
En segundo lugar, los lobos no son seres humanos, de modo que no tiene mucho sentido aplicar la investigación sobre los lobos en los seres humanos. ¡Somos mucho más complejos y tenemos una forma de vida completamente distinta!
No obstante, se podría decir que el modelo de macho alfa en la jerarquía social humana aún puede ser de utilidad para comprenderte a ti mismo. Pensar en tu personalidad en estos términos puede ayudarte a entender mejor tus fortalezas y debilidades, siempre que no influya negativamente en cómo tratas a los demás. Como sucede con cualquier sistema de organización social, los seres humanos somos demasiado raros, impredecibles y complejos como para encajar dentro de una categoría precisa.
Dicho todo eso, veamos los principales roles en el modelo de macho alfa de la jerarquía social:
- Los machos alfa son líderes naturales. Son extrovertidos, seguros de sí mismos y saben cómo hacer las cosas. Harán todo lo posible por alcanzar sus metas y, en raras ocasiones, retrocederán ante una pelea.
- Los machos beta son cariñosos, amables y realistas. Por naturaleza, pueden simpatizar con los demás y ver nuevas perspectivas, y saben que, cuando una persona tiene éxito, todos lo tienen.
- Los machos gamma mantiene al grupo unido como una sola unidad social mediante sus personalidades divertidas, creativas y aventureras. Son el alma de la fiesta y desean ayudar a los demás a relajarse.
- Los machos sigma son los inconformistas del grupo. No les motiva el poder o el dinero, sino más bien intentan alcanzar sus propias metas personales mientras enseñan a los demás cómo hacer las cosas.
Y algunos roles adicionales que expanden el modelo:
- Los machos delta son organizados y responsables. Saben cómo mantener el mundo en movimiento, además de ser competentes y motivados en muchas áreas de la vida.
- Los machos zeta son inconformistas creativos. Impulsan a la sociedad rompiendo límites y haciendo cosas que los demás podrían considerar extrañas o irracionales.
- Los machos omega son introvertidos y no les motiva la validación. Hacen cosas por amor a su profesión y se sienten a gusto al ser independientes o trabajando solos.
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